VTV.- El dirigente de la derecha
venezolana Juan Requesens,
del partido Primero Justicia, reconoció durante un foro en una universidad de
EEUU, el plan de la oposición para promover una intervención extranjera en
Venezuela.
“Para llegar a una intervención extranjera tenemos que pasar esta
etapa”, dijo el derechista venezolano, en referencia a las acciones promovidas
desde abril, que han derivado en hechos violentos y vandálicos. Hasta el
momento, más de 80 personas han muerto en medio de estos hechos y al menos
1.500 han resultado heridas en medio de estos hechos.
El diputado de derecha reveló que la oposición venezolana se encuentra
en proceso de discusión sobre un plan denominado “hora cero”, que abarca una
gran movilización sin el retorno de las personas a sus hogares. Según
Requesens, lo que buscan los sectores de derecha del país es paralizar por
completo el país.
“Empresa que no se pare que sus trabajadores no vaya y si quieren ir los
trabajadores y trabajar su empresa, pues está trancado y no llegan. Eso tiene
sus pro y sus contra. Hay gente que se molesta, pero señores el 16 de julio
quedarían 14 días para la constituyente y ya no tenemos nada que perder”,
afirmó el dirigente de derecha.
En este sentido, Requesens señaló que no se puede llegar al 30 de julio
(día de las elecciones de los candidatos para la Asamblea Nacional Constituyente)
“sin que haya una paralización absoluta de la vida cotidiana de la gente”, por
lo que el objetivo pasa por “agudizar la crisis” y promover un escenario de
ingobernabilidad.
Diversos testimonios revelan que dirigentes de oposición venezolana han
reclutado a jóvenes para emprender estas acciones violentas como forma de
desestabilización al Gobierno de Nicolás Maduro.
De acuerdo con uno de estos jóvenes, diputados de la oposición han
entregado drogas e implementos para hacer explosivos a un grupo de personas con
el fin de llevar a cabo este plan violento.
Las protestas violentas de la oposición también se han caracterizado por
crímenes de odio contra personas señaladas como chavistas (simpatizantes de la
Revolución Bolivariana y el Gobierno de Nicolás Maduro), en las que siete
jóvenes han sido quemados vivos por manifestantes.
Las autoridades venezolanas han denunciado el plan golpista de este
sector y aseguran que son respaldados por fuerzas imperialistas desde Estados
Unidos y en el seno de la Organización de Estados Americanos (OEA) a través de
su secretario general, Luis Almagro.