Telesur.- "Queridos compañeros, cuiden al país, cuiden a la Revolución", así se despidió de sus simpatizantes el expresidente de Ecuador, Rafael Correa, antes de partir a Bélgica, donde se radicará con su familia, tras gobernar durante diez años (2007-2017).
El exmandatario se dirigió a los ecuatorianos desde una tarima improvisada en las afueras de la sala protocolar del aeropuerto internacional de Quito. "Me voy feliz, pero la alegría o la tristeza coyuntural no altera esa condición del alma, que da la paz con uno mismo. Yo estoy feliz, estoy bien, no se preocupen por mí, preocúpense por el país. A defender lo ganado, a defender la Revolución", expresó.