"Su familia la buscó siempre. Fueron de los primeros en hacer la denuncia en Abuelas", indicó la presidenta de la asociación. El nombre de la joven es Adriana, de 40 años de edad, pero sus padres biológicos pensaban en bautizarla como Vanesa.
Violeta fue secuestrada el 14 de diciembre de 1976 con ocho meses de embarazo mientras que Edgardo "buscó por todos lados a su mujer hasta que el 8 de febrero de 1977 también fue secuestrado", relató en una rueda de prensa.

Por su parte, la nieta expresó haberse enterado que "no era hija biológica de mis padres un sábado y el lunes siguiente ya estaba acá para preguntar si era hija de desaparecidos, más que nada por mi fecha de nacimiento”.
“Estoy feliz, estoy plena, se me completó la vida. La sensación de pasar de pensar que fui abandonada, no deseada, a sentir que fui una persona muy querida, muy deseada, muy buscada, que tengo una familia hermosa y que tengo una abuela, ¡no lo puedo creer!", afirmó con emoción.